(Por Fabián Solari - Fotos y video: Vero Rodríguez) - Desde la disolución de KZ4! veníamos esperando el regreso de Martín Knye, uno de los guitarristas más virtuosos del país. La convocatoria era para Asbury pero a último momento se trasladó a un par de cuadras, a Pana Rock. Noche otoñal que amagaba con un frío insoportable que nunca llegó, tal vez, por la elevada temperatura que generó el debut de Mad Dog. La cita convocó a músicos del ambiente que se acercaron para darle su apoyo a este nuevo proyecto de Knye, casos ejemplos de Horacio Pinasco, Enrique Gómez Yafal y Pablo Mingori entre otros.
Sucio Jack como teloneros calentaron motores con un sonido que se las hizo difícil, la evidencia era tal que el vocalista Jorge "Moe" Rivas manifestó los nervios que sentían tanto por el propios set como por el plato fuerte que se estaba preparando. Un set medio tiempo con temas ajustados, un guitarrista entre técnico y combativo y un vocalista que fluctuaba entre impostación y melodías poco claras. El bajista Diego "Branca" Monti sobresalía por la pulcritud y eficacia en cada nota. Sucio Jack merece, por lejos, una nueva escucha para poder determinar el potencial.
Cervezas con bandeja de fritas en un intevalo corto mientras se daban los últimos toques para el debut de Mad Dog. Martin Knye en guitarra, Javier "Oso" Muñiz en voz, Adrian Micheli en batería y Diego Magnacca en bajo, Mad Dog en pleno asaltaron el escenario al mando de un perro infernal que se las traía. Los primeros acordes de "Sin ley" sonaron y ya nada fue lo mismo hasta el final. Pana Rock se pobló y el heavy metal del bueno lo azotó cual animal rabioso en busca de su presa. "Como dios del metal" no dio tregua y a esa altura el carisma de Muñiz se metía al público en el bolsillo. El primer tema de factura canina, "Dios del asfalto", demolió las expectativas con toda la furia y polenta que las 6 cuerdas de Martín Knye más una base compacta a cargo de un buen combo bajo-batería. "Velocidad" cerró la primera parte con la intensidad a puro brillo. "El sur", "Huestes" (tema propio) y "Hellraiser" crecieron en emoción para dar un nuevo salto con una gran versión de "Concierto para ellos" de Barón Rojo. Con arreglos aggiornados, "Twister" de Magiar preparó el terreno para un final a todo rock and roll bien pesado: el último tema propio homónimo para un breve intervalo. Los golpes de batería anunciaron el amor que profesa Knye por la banda emblemática del rock and roll pesado nacional... "Ruedas de metal" y el final con una metalera versión de "Fortunate son" de Creedence nos dejó a todos exhaustos, coléricos, rabiosos por la mordedura de ese perro infernal que atacó duro y parejo en la noche de Floresta. Volvió Martín Knye, gracias por tanto.
Martín Knye flanqueado por Vero Rodríguez y una amiga |
Fabián Solari con Martín Knye |