«Como la mayoría de vosotros sabe, Sylvain luchó contra el cáncer durante los últimos dos años y medio. Aunque luchó valientemente, ayer falleció de esta enfermedad. Mientras lamentamos su pérdida, sabemos que finalmente está en paz y sin dolor. Por favor, poned su música bien alta, encended una vela, rezad una oración y enviemos a este hermoso Doll en su camino».
Tras la ruptura, Sylvain se embarcó en una carrera en solitario que arrancó con un álbum debut homónimo en 1979, y continuó con varios discos hasta los noventa. Cuando los New York Dolls se reunieron, Sylvain apareció en sus álbumes «One Day It Will Please Us to Remember Even This» (2006), «Cause I Sez So» (2009) y «Dancing Backward in High Heels» (2011). Este regreso fue catalizado por uno de sus mayores fans, Morrisey. «Adoro a Morrissey por lo que hizo», diría Sylvain Sylvain como agradecimiento. «Le dio a New York Dolls su último momento de brillantez. Nos afectó tanto que nos llegamos a plantear si era una señal de Dios para que no siguiésemos, a pesar de que el teléfono no dejaba de sonar para que volviésemos. Nos preguntábamos si era honesto hacerlo. Fue otra vez Morrissey quien nos dijo que el mundo necesitaba una banda de auténtico rock and roll».
Su compañero de banda, el cantante David Johansen, ha recordado a su «mejor amigo durante tantos años» con un comunicado en sus redes sociales: «Todavía puedo recordar la primera vez que lo vi entrar en el local de ensayo / tienda de bicicletas con su bolso y su guitarra directamente desde el avión, después de haber sido deportado de Ámsterdam. Instantáneamente lo amé. Te voy a extrañar, viejo amigo. Mantendré las hogueras encendidas. Au revoir Syl mon vieux copain».
Una de las despedidas más emotivas ha sido la de Lenny Kaye, guitarrista de Patti Smith: «Su papel en New York Dolls fue ser el eje de la banda, manteniendo con precisión la órbita de los satélites de sus compañeros. Los New York Dolls anunciaron el futuro, hicieron que fuera bailable. Desde el momento en que vi por primera vez aparecer su póster en la pared de Village Oldies en 1972, anunciando una residencia en el Mercer Hotel calle arriba, durante su ascenso meteórico y el destello de estrellas fugaces, los New York Dolls fueron el núcleo caliente de esta música que amamos. La banda que te hacía querer formar una banda».
«Una de las cosas de las que estamos más orgullosos es que demostramos que no había que ser los Beatles o los Stones para fichar por una multinacional», declaraba Sylvain Sylvain en ABC hace catorce años.
El cantante David Johansen es ya el único miembro fundador superviente de New York Dolls. Su primer baterista, Billy Murcia, murió en 1971 por una asfixia accidental, cuando una groupie intentó reanimarle obligándole a beber café tras desmayarse por la ingesta de alcohol. Su sucesor, Jerry Nolan, sufrió en 1991 un derrame cerebral que lo dejó en coma hasta su muerte, el 14 de enero de 1992. El bajista Arthur Kane falleció el 13 de julio de 2004, 22 días después de haberse reunido con The New York Dolls. Y el mítico guitarrista Johnny Thunders fue encontrado muerto por sobredosis de metadona, en un cuarto de hotel de Nueva Orleans en abril de 1991.
Fuente: ABC