Los grupos volvieron a presentarse en la Argentina este 18/9 ante una audiencia de 30.000 fans. Nuevas canciones y clásicos de todos los tiempos.Dos de las máximas leyendas del rock pesado volvieron a compartir escenario en Buenos Aires. Como lo hicieran en 2005, Judas Priest y Whitesnake deleitaron a sus fans en una misma noche, la del 18/9, esta vez en el estadio de Racing, en el partido de Avellaneda, donde se concentraron cerca de 30.000 personas.
Mientras el grupo del ex Deep Purple David Coverdale vino a promocionar su más reciente disco, 'Forevemore', la banda de heavy metal del cantante Rob Halford y compañía ofreció lo que seguramente fue su último show en el país.
La serpiente blanca
A las 19:00, luego de los locales Tren Loco y Lovorne, la banda de Luciano Napolitano, el hijo de Pappo, Whitesnake arrancó con 'Best years', a la que pegó 'Give me all your love tonight', un clásico del disco conocido como '1987', el más celebrado del grupo. De esa misma placa sonaron los infaltables 'Here I go again', 'Still of the night' y la balada 'Is this love'.
'Forevemore', editado este año, dijo presente con 'Steal your heart away', 'Love will set you free' y la canción que le da nombre a la placa.
El concierto también incluyó notables solos, como el del baterista Brian Tichy (quien en un momento tocó solo con sus manos desnudas) y el duelo de guitarras entre Doug Aldrich y Reb Beach.
Si bien el sonido fue aceptable, se notaron las debilidades en la voz de Coverdale, sobre todo a la hora de interpretar canciones como 'Fool for your loving', y el clásico de Purple 'Burn' en el cierre.
The Priest is back...
A las 21:00 Judas Priest comenzaba lo que iba a ser un extenso show. Un telón que cubría todo el escenario con la leyenda 'Epitaph' (el nombre de la gira, la última a nivel mundial) cayó con el arranque de 'Rapid fire', a la que le siguieron 'Metal Gods' y 'Heading out to the highway'.
El set list incluyó canciones de todos los discos que Judas grabó con Halford, por lo que quedaron excluidas las de los 2 álbumes editados durante el paso de Tim 'Ripper' Owens en la voz entre 1997 y 2003.
Sonaron muchos temas de la década del 70, como 'Victim of changes', 'Starbreaker', 'Beyond the realms of death' y 'Hell bent for leather'. Una de las perlas, podría decirse, fue 'Never Satisfied', del 1er disco de Judas, 'Rockarolla', que no suelen repasar en vivo.
La década del 80, donde Judas Priest tuvo todo su brillo, apareció con 'Breaking the law', 'Electric Eye', 'The sentinel' y 'Turbolover' entre otros.
'Painkiller', para muchos el mejor disco de la banda, dijo presente con 'Nightcrawler' y el tema homónimo, uno de los que más encendió al público y en el que Halford exhibió sus limitaciones vocales.
'Prophecy' y 'Judas rising', por su parte, representaron a la etapa más reciente de la banda inglesa de metal.
Para este concierto el grupo trajo todos los chiches. El escenario estaba ambientado en una fundidora, con réplicas enormes de recipientes de fundición a cada lado con cadenas que salían de ellos. Tampoco faltaron el fuego y los rayos láser.
Otro de los puntos sobresalientes fue el protagonismo del joven Richie Faulkner, quien reemplazó al guitarrista y fundador de Judas K.K. Downing, quien abandonó el grupo después de 40 años.
El final se aproximaba con el tradicional ingreso de Halford al escenario a bordo de una Harley Davidson. Acto seguido sonó 'Hell bent for leather', luego 'You've got another thing coming', mientras que 'Living after midnight' le puso el broche de oro a un espectáculo de 2 horas 20 de duración.
Fuente: Urgente 24
